Escrito por Verónica la segunda de mis «estrellas invitadas».
Esta mañana he leído las siguientes noticias, todas acaecidas en África
– que se está produciendo una escalada de ataques a los trabajadores humanitarios en el el Congo, impidiendo asistir a cientos de miles de personas.
– que la UE ha liberalizado el comercio de productos agrícolas con Egipto.
– que Zimbabue está obteniendo contratos de inversión en el sector del turismo por valor de más de dos billones de dólares
– que Marruecos va a financiar con 39,65 millones de euros para la construcción del embalse Tamalout sobre el Río Ansegmir, en Jenifra.
– que más de 5.000 mujeres fueron víctimas de violaciones sexuales en Congo Kinshasa solamente en los primeros seis meses de este año.
Las he leído porque estoy suscrita a una web de noticias de África. Si no fuera así, y es lo que quiero plantear aquí, no podría enterarme por los medios de comunicación convencionales.
Creo yo que si hiciéramos el test de asociar palabras con lo primero que te viene a la cabeza, la mayoría de la gente al pensar en África contestaría hambre. Obvio. Porque ni siquiera la malaria aparece mucho en los telediarios, y eso que mata 3 millones de personas al año. Pero sin embargo este verano sí llevábamos el recuento de cada nuevo infectado por la nueva modalidad de gripe.
Todo comienza por la selección de noticias. Que se construya un embalse sobre un río de Marruecos que no conozco, pues no nos afecta de forma muy directa ni a mí ni a los que me rodean, y podemos considerar que es una noticia secundaria. Pero cuestionemos cualquier emisión de telediario y veamos cuantas noticias no nos importan para nada. ¿A alguien le importa el simulacro de tornado que hicieron hace poco en EEUU?
En una ocasión, en un taller estratégico nos planteaban la difícil cuestión de cómo podríamos erradicar el SIDA en el mundo. La solución no la íbamos a resolver nosotros pero lo que más me chocó es que en mi grupo, todos pensaban en informar en institutos y lugares de copas donde se concentran adolescentes. Es decir, desde un punto de vista europeo o americano, sin saber que solo por cantidad, la mayoría de los esfuerzos habría que dedicarlos a África ya que el 70% de los adultos y el 80% de los niños que viven con el VIH están en África. ¿Quién nos cuenta esto? ¿Acaso no se habla del SIDA en las noticias?
Estar al día implica un esfuerzo por nuestra parte y lo más normal es conformarnos con “aceptar” lo que nos ponen delante. La cuestión es si no nos apetece hacer el esfuerzo de ser críticos o hemos llegado al punto de que no somos ni conscientes de ello.
Si te ha interesado esta noticia, te invito a visitar el blog de Verónica: http://cercadeafrica.wordpress.com/
VMM
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